sábado, 4 de diciembre de 2010

Disgrafía: Dificultad específica en la escritura


¿Qué factores inciden en la escritura?
La escritura es una actividad linguística secundaria. Se pueden detectar aspectos comprensivos y de producción. El factor comprensivo está relacionado con el OUTPUT cognitivo o capacidad cognitiva. En cambio, el factor de producción está relacionado con el OUTPUT motor. Este último es el que se encuentra alterado en una disgrafía.
Es importante diferenciar entre las dificultades de escritura propias de una dislexia y entre dificultades de escritura específicas con alteración del mecanismo de la escritura.
En el OUTPUT motor intervienen diversas funciones.
organización kinestésica o memoria de movimiento
organización motriz
coordinación motriz fina
organización espacial
¿Qué aspectos hay que tener en cuenta para detectar dificultades en la escritura?
Para detectar dificultades en la escritura se debe tener en cuenta los siguientes aspectos:
1. Trazado
2. Forma
3. Legibilidad
4. Fluidez
5. Significado
¿Cuándo se puede diagnósticar una dificultad en la escritura?
A partir de los 6-7 años se puede hablar de una dificultad en la escritura cualquiera sea de los aspectos alterados. Una disgrafía normalmente muestra alterados los items 1 al 4.
Se puede hablar de una “pre-disgrafía” o de niño en riesgo a partir de los 4-5 años.
¿Cuáles son los signos para observar en una escritura?
- Calidad del trazo: muy fuerte o muy débil.
- Espacios inapropiados entre las letras, palabras o en la ubicación en la hoja (ej. empieza siempre dejando un espacio amplio luego del margen).
- Dificultad para mantenerse en el renglón.
- Letras desorganizadas o con el diagrama incorrecto
- Ilegibilidad
Tipos de disgrafía según Deuel:
Evolutiva: se denomina así al tipo de dificultad ocurrida por disfunción cerebral. El niño presenta dificultades desde el inicio del aprendizaje.
Adquirida: se denomina así a la disgrafía producida por lesión cerebral luego de un accidente. Se observa una pérdida de habilidades previamente adquiridas.
No Específica: producida por dificultades cognitivas y emocionales o por una incidencia del método de enseñanza en el rendimiento del niño. Este tipo de disgrafía se observa generalmente en niños con trastorno neurológico y bajo rendimiento cognitivo.
Específica: Producida por dificultades de lenguaje, aprendizaje (dislexia), motrices o visomotoras.
Las dificultades específicas se pueden clasificar en dos tipos de perfiles:
1. SABE COMO ESCRIBIR PERO ES TORPE
Dificultades de aprendizaje: el niño disléxico generalmente muestra dificultades en la lectura, en el manejo de la ortografía y en la legibilidad de la escritura. Las dificultades de escritura pueden presentarse de esta manera en un disléxico o presentar un cuadro comórbido, es decir, que se suma al de las dificultades de lectura.
Dificultades motrices: el niño con dificultades motrices generalmente muestra dificultades en la organización de redacciones libres, en el copiado y en el diseño de las letras. No presenta dificultades en el significado de su escritura y es posible que no presente dificultades en la ortografía.
2. NO SABE COMO ESCRIBIR
Dificultades visomotoras: este niño muestra dificultades severas en la organización espacial, en la legibilidad, en la planificación motriz y en la diagramación de las letras. Generalmente son niños torpes, que muestran descendida la figura humana, el armado de rompecabezas y la construcción con cubos.

Existen dos tipos de prensión importantes para la escritura:
PRENSIÓN SOBRE EL LÁPIZ: se determina por la forma de toma del lápiz. La misma debe ser en pinza, con la presión puesta en los dedos pulgar e índice y con soporte en el dedo mayor. Un niño torpe generalmente utiliza mal la fuerza y no desarrolla destreza digital. Por ello toma el lápiz en forma incorrecta realizando la presión con una zona incorrecta (palma, 4 dedos). Ello genera cansancio y por ello se ve afectada la fluidez en la escritura.
PRENSIÓN SOBRE EL PAPEL: se determina por la posición de la mano que no escribe. La misma debería funcionar de soporte de la hoja a fin de obtener un mayor dominio de la coordinación visomotriz, sostener la hoja y disminuir la presión de la mano que escribe. El niño con dificultades generalmente deja la mano en sus faldas, o la ubica debajo de la mesa o la utiliza para tocar cosas. Ello le hace perder el control sobre lo que escribe y sobre la prolijidad-legibilidad. Es lo mismo que intentar escribir sobre un autobús: se delega el control de la legibilidad a los semáforos..
Ambas prensiones son importantes para el logro de una escritura eficiente.

Por: Rufina Pearson

2 comentarios:

  1. Me parecio interesante que pusieran esto, porq no todos estamos consciente y creo que a varios niños les pasa esto y como futuros docentes deberiamos tenerlo en cuenta para realizar nuestras actividades.

    ResponderEliminar
  2. Creo que en la Universidad podrían enseñarnos más sobre este tema, es muy interesante e importante de manejar, quizás un seminario sobre el tema no sería malo, no todos los docentes manejan esta información, en una de mis prácticas tuve un niño de 5 años que escribia hacia atrás, osea empezaba en la orilla de las ojas y seguia escribiendo hacia dentro, le pregunté a la educadora, no sabia el por qué :/, aún sigo con la duda...
    Además creo que seria bueno manejar estrategias para trabajar con ellos.

    Saludos y felicitaciones por la información.-

    ResponderEliminar